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LA TRADICIÓN Y LA MODERNIDAD DE SU PUEBLO:

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VARIANTE EN PLANOS CONSTRUCTIVOS: techo del escenario con apariencia similar
a lo circundante para mimetizar el perfil del horizonte con edificios vecinos

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PARQUE CENTRAL DE ESCAZÚ
REMODELACIÓN 2009

ANTECEDENTES:

Con el establecimiento del Plan Estratégico para el Desarrollo del Cantón de Escazú, quedó planteada la necesidad de mejorar el estado, calidad, estética y seguridad del casco urbano, en base a lo cual se nombró la Comisión de Rescate del Casco Urbano. Entre múltiples consultas, emergió como una de las mayores prioridades, la necesidad de remodelar el Parque Central de Escazú.

Para verificar esta hipótesis y establecer los requerimientos populares al respecto, la Municipalidad de Escazú, contrató a Acción Sinérgica Consultores  S.A., empresa especializada en opinión pública, la cual elaboró encuestas y entrevistas, bajo conceptos metodológicos propios de las ciencias sociales, en base a lo cual elaboró el informe que sirvió de base para la contratación de una empresa consultora para elaborar un anteproyecto para la remodelación del parque.

El informe de la Empresa Sinergia S.A. se denomina: “Visión Ciudadana para la Remodelación del Parque Central de Escazú, con Desarrollo de las Ideas”.
Mediante licitación pública (2007LA-000045-01) para la “Contratación de servicios profesionales para realizar la elaboración de anteproyecto del Parque de Escazú”  se seleccionó a la Empresa Consultora Valdesol S.A.(Contrato No. 2007-000023) para dicho propósito.

DIAGNÓSTICO:

Hasta hace aproximadamente 15 años el espacio en estudio funcionaba como plaza de fútbol, transformándose en un parque con una serie de intervenciones puntuales sin obedecer a un concepto integral de concepto, estética, simbolismo ni funcionalidad. No hay elementos que tengan ningún valor histórico o patrimonial a rescatar por calidad técnica, artística o significado.

En consecuencia se tiene un espacio demasiado fragmentado por aceras, canchas y un quiosco que no corresponden a las necesidades funcionales de los flujos peatonales y usos sociales predominantes y deseables.

La infraestructura, como aceras muros, bancas, quiosco, etc., ya ha alcanzado su nivel de obsolescencia y su deterioro es notorio y su posibilidad de recuperación es prácticamente nula, además de no corresponder a los requerimientos funcionales básicos.

El quiosco existente fue hecho con carácter provisional, sin calidad técnica y estética que armonizara con el casco urbano, su altura de piso genera ángulos visuales  inapropiados para la presentación de espectáculos y sus dimensiones son limitadas al efecto. Debajo cuenta con un semisótano usado actualmente como archivo, pero que por filtraciones incorregibles se está en proceso de desalojo. Tiene un alto estado de deterioro.

Existen dentro del parque unos servicios sanitarios, construidos provisionalmente para atender la feria del agricultor que se realiza un día a la semana en la calle sur del parque. La obra adolece de las condiciones higiénicas, técnicas, reglamentarias y funcionales mínimas, además de ocupar un lugar demasiado notorio y destacado visualmente dentro del parque, lo cual atenta contra el más elemental sentido de estética y decoro.

En general las aceras internas, incluyendo accesos, tienen demasiadas gradas diseminadas por toda la superficie, lo cual impide la accesibilidad universal e incluso la dificulta a personas normales, que por su ubicación inesperada las convierte en peligrosas.

La mayoría de los árboles son nativos y apropiados, pero hay algunos pocos laureles de la India, eucaliptos y una araucaria, que ajenos al medio, son peligrosos, dañinos al medio autóctono o incompatibles con la infraestructura.

En consecuencia se requiere una conceptualización y replanteamiento acorde a las nuevas exigencias urbanas.

PROPUESTA DE REMODELACIÓN
CONCEPTO FORMAL:

Se traslada al parque, como símbolo del corazón de la comunidad, la particular solución que el pueblo escazuceño ha dado mediante terrazas y balcones, a la condición topográfica. Una relación de apertura, de comunicación y amistad entre lo privado y lo público. Hay una fuerte presencia de la posibilidad escenográfica y de vistas panorámicas. Este concepto es parte de una tradición bien identificada, que se aprovecha y se potencia en el nuevo diseño, generando múltiples terrazas con vistas que dominan la actividad que se da en diferentes sectores del Parque y alrededores.

Otro elemento permanente en el imaginario colectivo en Escazú son las omnipresentes montañas en el horizonte, su silueta curvilínea es todo un arquetipo que aprovechamos para insinuarlas en los trazos de las aceras, barandas, muretes, mallas, verjas, techos, paredes y balcones. Estas curvas aportan además suavidad y fluidez, tanto para la  vista como para el movimiento peatonal, complementándose armónicamente con las áreas verdes, ajardinadas y sus árboles.

Los muretes o pretiles, que se reiteran como costumbre para las reuniones y esperas informales, también se retoman y se ubican en lugares estratégicos, para que acompañados de bancas y mesas, potencien la interacción comunal en este poderoso punto de encuentro que es el Parque Central.

CONCEPTO SIMBÓLICO Y FUNCIONAL:
Alrededor del Parque están representadas las instituciones sociales que por excelencia reflejan la tradición de la organización socio económica del pueblo, de lo cual derivan sus valores y principios de interrelación social: la Iglesia, la Escuela, la Municipalidad y el Comercio. Así que se busca una expresión formal dentro del Parque donde se perciba la convergencia como extensión constructiva de la Fe, la Educación, la Administración Pública y los Servicios. Se concibe el Parque como punto de encuentro y catalizador de las fuerzas sociales.

A la Iglesia se le amplía su explanada frontal, se limpia de estorbos, barreras, gradas mal resueltas y como totalidad se le da carácter de balcón con una franca vista panorámica hacia el resto del parque, para que éste le acoja con su tinte verde y fresco a la salida de los oficios religiosos. Se plantea de tal manera que la explanada pueda ser utilizada para distintos eventos, incluso ceremonias al aire libre. Se crea una comunicación interna desde la EXPLANADA DE LA IGLESIA hacia el resto del Parque, mediante dos corredores: el Paseo de la Cultura, con sus galerías artísticas y artesanales, información turística, servicios sanitarios, comida típica, etc., y el PASEO DE LOS PRÓCERES, como un recorrido tranquilo y a la sombra de los Robles Sabana, con “pollos” y placas conmemorativas, esculturas y otros recuerdos meritorios  del Escazú de siempre.

La Escuela actualmente no cuenta con el tradicional patio para el solaz y juego infantil, por lo que se le provee de LA TERRAZA DEL MIRADOR, una respetable área verde, arena y adoquín adicionales  (1.900 m2 aprox.) frente a la Escuela, además de aceras más anchas, una calle para una sola vía vehicular, que además tendrá una textura que la identificará como área peatonal, tendrá un control del paso de vehículos en horas lectivas, para mejorar la seguridad de los escolares, padres y docentes, cuya situación actual es crítica. Se integra la Escuela al Parque, sin que pierdan su identidad, pero potenciando el carácter lúdico y de interacción social de la actividad escolar.

También aquí se genera un extenso y curvilíneo balcón, que permite al estudiante una visión totalizante de las actividades que concentra el Parque. Visión de conjunto, inclusión, participación y respeto, que deben caracterizar la educación para la vida comunitaria urbana. Posibilidad física concretada por el diseño para la práctica de esos valores.

Esta terraza se convierte en el espacio óptimo para que los padres de familia interactúen mientras espera la salida de los escolares.
En el costado oeste, con sus bancos y comercios, representa el intercambio privado de bienes y servicios, como importantísima componente urbana y cultural. Se comenta del proyecto de un centro comercial en la parte central de la cuadra, que dado las regulaciones urbanas tendrá parqueos y otras áreas abiertas hacia el Parque, amplificando su relación e integración.

En este costado del Parque se ubica un elemento complementario muy arraigado en el sentir popular, que se consolida con el ÁREA INTEGRADA DE CULTURA Y DEPORTE, espacio techado con malla perimetral e iluminación, para actividades deportivas y culturales bajo techo, lo que posibilita un uso intensivo y diverso, como fútbol 5, baloncesto, voleibol, porrismo, aeróbicos, danza, bailes típicos, música en casi todos su formatos de presentación, cabildos abiertos, celebraciones patrias, organización comunal, etc., especialmente al contar con un escenario anexo, con lo cual esta área puede albergar más de 600 personas sentadas (540 m2). Su cerramiento con mallas escultóricas y amplios portones, permiten la coexistencia de actores y espectadores, sin peligro para ninguno, adultos mayores, niños y mujers viendo partidos sin problemas de "bolasos".

En el centro del Parque y como complemento al escenario mencionado, se ubica EL ANFITEATRO DE ESCAZÚ, una explanada circular  tipo ágora, pavimentado y al aire libre, con 655 m2, para múltiples actividades informales u organizadas. En sus bordes tiene dos niveles de muro / banca, para comodidad de los observadores y en un excéntrico punto hay un mini escenario circular de 15 m2, para otras expresiones culturales como cuentacuentos, predicadores, músicos, mimos, mascaradas, y muchas más adicionales como ferias artísticas, filatélicas, artesanales, domingos embrujados, etc.

Como ampliación de las posibilidades del anfiteatro se provee EL ESCENARIO EMBRUJADO, tarima fija de 168 m2 a un metro de altura, para hacer presentaciones de mayor tamaño, como orquestas, teatro, conciertos, celebraciones comunales, cabildos abiertos, etc., etc. El escenario es techado y cuenta con gradas, rampas y vestidores. También se prevé sistema de iluminación y sonido, así como anclajes para múltiples telones y escenografías.

El escenario es de tipo reversible, ya que cuenta con dos amplios portones que habilitan como área de espectadores otro espacio techado: EL ÁREA INTEGRADA DE ARTES Y DEPORTES, que como área techada y cerrada con una malla escultórica, puede usarse para reuniones de hasta 600 personas, aún en presencia de la lluvia.

En las esquinas noroeste y suroeste se ubicaron sendos vestíbulos, círculos de 15 metros de diámetro, que reciban francamente el importante flujo peatonal proveniente de esos sectores. Se engalanan estos vestíbulos, uno con la ESCULTURA DE LA CURANDERA ESCAZUCEÑA, apoyada con un muro escultórico y terrario con plantas medicinales tradicionales de la “bruja” de Escazú. El vestíbulo suroeste se reserva para un MONUMENTO A MERCEDES GUILLÉN, héroe escazuceño de la gesta del 1856.

En resumen se trató de hacer converger en el Parque Central a todas las fuerzas activas, dando cabida a todas las personas y manifestaciones populares, creando un espacio que se entienda como el corazón de Escazú.

Por tal motivo, incluso las calles se reducen a un solo carril en el costado note y sur, ampliando aceras a ambos lados. En la misma calle se colocarán adoquines de fuerte textura, para que los conductores deduzcan que hay posibilidad de paso vehicular pero que es un área peatonal, donde éste tiene prioridad, así ampliamos el tamaño del Parque en cuanto utilidad, función, interrelación y percepción, mejorando su funcionamiento al tener incluso aceras notoriamente más anchas para responder al volumen actual de tráfico peatonal.

En las calles sur y oeste se acondicionan sendas bahías para autobuses en tránsito, con sus respectivos techos para quienes esperan, protegidos del sol o la lluvia.
El equipamiento se planteó basado en los usos, costumbres y potencialidades del Parque: se ubicaron mesas con bancas de concreto en el área donde esperan los padres de familia a los niños de la escuela, así como en el Paseo de la Cultura.

Se ubicaron estratégicamente, muchos basureros colocados con el criterio de que estén en todas las entradas y salidas de puntos de reunión o direccionalidad, recolectores clasificadores de vidrio y baterías de desecho, teléfonos públicos, hidrantes y conexiones de agua para limpieza de basureros y aceras.
La terraza del mirador, que es a su vez el techo de la galería municipal y otros locales, se prevé con un sistema de recolección y filtro de aguas llovidas, que se canalizan hacia un tanque subterráneo para agua, que supla las necesidades de irrigación y respaldo contra incendios.

Se plantea un parque con las características de accesibilidad universal, según criterios vigentes a la fecha, se cumple en todo con la Ley 7600 y se amplía hacia otras necesidades como marcas táctiles en suelo y muros en esquinas o cambios de dirección, todo mobiliario está ubicado fuera de posibles trayectos para invidentes y se dejarán las previstas para semáforos peatonales con señales auditivas.

El anteproyecto, mediante planos, una maqueta física y otra virtual, con herramientas multimedia fue presentado a toda la ciudadanía escazuceña, aprovechando la multitudinaria convocatoria del “Domingo Embrujado” del 6 de julio del 2008. La Comisión se encargó de levantar un Acta con las sugerencias y opiniones de los visitantes, mismos que fueron sujeto de análisis para incluirlos en propuesta final, no obstante se motivó al público en general, así como autoridades administrativas y eclesiásticas, comerciantes, funcionarios, para que en un plazo de un mes hicieran llegar a la Comisión cualquier observación que consideraran oportuna.
El 24 de julio el proyecto fue presentado oficialmente ante el Consejo Municipal, Alcalde, Delegados Distritales, Comisión de Rescate del Casco Urbano, Departamento de Desarrollo Urbano y público interesado.

En ambas ocasiones la acogida fue muy motivante y las sugerencias muy positivas, las cuales fueron incorporadas al proyecto final.
En esencia, este anteproyecto es el resultado de un esfuerzo conjunto entre un grupo interdisciplinario coordinado por la Empresa Consultora Planos y Proyectos Valdesol S. A. y la Municipalidad de Escazú, con especial y activa participación del Consejo, el Alcalde, Delegados Distritales, Procesos de Desarrollo Urbano y de Proveeduría, así como la Comisión de Rescate del Casco Urbano, quien coordinó, recopiló y procesó las inquietudes ciudadanas y dio seguimiento a todo un trabajo de aproximación sucesiva para plasmar los objetivos, especialmente los concretados en la encuesta de opinión pública denominada “Visión ciudadana para la remodelación del Parque Central de Escazú”.

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